Artículo de opinión
El Cajero del Rey Midas
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Proliferan las máquinas expendedoras de lingotes de oro
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Permiten comprar tabletitas de oro desde 50 a 3.000 euros
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Los precios en estos aparatos se actualizan cada diez minutos
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El lingote de 50 euros es el más solicitado, pero se pueden pagar más de mil euros
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El oro es una buena opción para tener en los bolsillos en tiempos de incertidumbre
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La inseguridad financiera mundial ha disparado la fiebre del oro como valor seguro
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También hay cajeros automáticos de criptomonedas en Madrid, Sevilla, Málaga y Las Palmas
Liu Suria, 11 jul 19 (Bahía del Palmer, Portus Magnus).- La primera
máquina expendedora de oro que conocí en el año 2010 se instaló
en el Hotel Palace de Madrid y fue un éxito al principio, pero luego
decayó. No caló el mensaje de “coloca tu dinero y recoge tu
oro”. Acabo de llamar por teléfono al Hotel Palace de Madrid y
me han confirmado que dicha máquina ya no está allí.
Midas fue un rey de Frigia que gobernó en el siglo VIII antes de
Cristo. Según la mitología griega, el monarca tenía la habilidad
de convertir en oro todo lo que tocara. Según Aristóteles, la
leyenda afirmaba que Midas murió de hambre debido a su extraño
poder.
La empresa que lo colocó es “Ex Orient Lux”, (“de
oriente viene la luz”) que pensaba implantar sus cajeros “Gold
To Go” (algo así como “Oro para llevar”) en varios países
más. Ya inauguraron el negocio de los cajeros en los Emiratos Árabes
con la colocación del primero de los cajeros de lingotes, que están
siendo todo un éxito.
Cuando esta máquina llegó a Madrid sólo existían otros dos
cajeros iguales en el mundo: en Abu Dabi y en el aeropuerto de
Bergamo, en Italia. Entró por la puerta grande para ubicarse en un
lugar privilegiado de uno de los hoteles más lujos y prestigiosos de
Madrid, el Hotel Palace. Fue recibida con gran acogida y expectación
por parte del público, pero en apenas seis meses, la primera máquina
expendedora de lingotes de oro a cambio de dinero que llegaba a
España se apagó en septiembre de 2010.
Los cajeros que se ubican en lugares turísticos funcionan de forma
diferente a los que se encuentran en bancos. En los primeros, la
gente adquiere un lingote a modo de ‘souvenir’, mientras que en
una entidad financiera la adquisición se realiza para invertir.
EL MECANISMO
Un cajero automático es una máquina expendedora usada para extraer
dinero (u oro en este caso) utilizando una tarjeta de plástico con
banda magnética o un chip (por ejemplo, tarjeta de débito o tarjeta
de crédito), o utilizando billetes directamente, sin necesidad de
presencia del personal del banco. Suelen tener una pequeña impresora
matricial o una impresora térmica para imprimir los resguardos de la
operación y actualizar las libretas de ahorros.
Y además de lingotes de 1,5 y 10 gramos dispensa monedas de oro.
Todos de 24 quilates con garantía de devolución. Los precios rondan
entre los 40 y los 1.040 euros, aunque se actualizan constantemente
en función de las fluctuaciones del mercado.
Del cajero automático se pueden extraer no sólo lingotes de oro de
1, 5 ó 10 gramos, sino también famosas monedas de oro como
Krugerrand, Maple Leaf y Kangaroo, en una caja de regalo, y al
precio del tiempo real. Se trata de una singular idea para un
inesperado regalo, que aúna la sorpresa con una sólida inversión
en metales nobles.
Un ordenador en el interior del cajero automático garantiza la
actualización del precio en tiempo real del oro. Gracias a ello, se
evitan las primas de riesgo comunes en el comercio de metales nobles.
Todos los lingotes tienen 24 quilates y cada artículo está provisto
de una garantía de devolución de dinero.
LA EMPRESA
La empresa alemana “TG Gold Super Marckt”, creada por
Thomas Geissler, ha llevado al extremo la idea de ofrecer oro
de inversión a los ciudadanos. Bajo la premisa de Geissler de que
“el oro es una buena opción para tener en los
bolsillos en tiempos de incertidumbre”, esta
compañía creó el primer cajero automático expendedor de lingotes
y monedas de oro.
Se trata de un dispositivo que está recubierto de una fina capa de
oro y que permite a los clientes comprar directamente este metal
noble. Cuenta con más de doscientas opciones, que van desde monedas
de oro a lingotes de diez gramos.
Además, y para evitar que las constantes fluctuaciones en el precio
del oro afecten a los posibles clientes, el cajero recibe información
on line sobre la situación del mercado y actualiza los precios cada
diez minutos como hemos dicho.
La compañía ha instalado cajeros en una veintena de lugares: desde
centros comerciales en Suiza, Alemania y Portugal, hasta en
aeropuertos como el de Bérgamo, en Italia. Pero las mejores
ubicaciones son en hoteles frecuentados por clientes de alto poder
adquisitivo, como el Emirates Palace en Abu Dhabi o el The Palm en
Dubai.
En Estados Unidos existen cajeros en el Hotel Golden Nugget, tanto en
Las Vegas como en Atlantic City, y en Nueva York. Y en Londres se
instaló uno en el Wesfield Shopping Center.
El
autor de este vídeo
de
dominio público es
Licenciado
en Periodismo
y
Oficial
de Aviación Reservista Honorífico, entre
otras titulaciones.
Mi seudónimo es Liu Suria. (Un seudónimo es un nombre o
‘alias’ utilizado por un periodista en sus
actividades, en vez del suyo propio, pero en realidad es
mi nombre espiritual.)
Todos mis artículos se publican en este nuevo blog:
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